Fotografía: David Álvarez
El Comité Ciudadano de Obra del puente vehicular San Pedro Mártir y Prolongación Bernardo Quintana se reunió la mañana del día lunes con diversas autoridades municipales como la Secretaría de Obras Públicas a fin de discutir lo relacionado a este proyecto, mismo que contará con una inversión de 250 millones de pesos.
Y es que, los representantes de vecinos de colonias y fraccionamientos aledaños, así como de ciclistas, cuestionaron diversos aspectos como la falta de iluminación, inundaciones y de una ausencia de conectividad con la ciclovía, asuntos que fueron tratados en búsqueda de una solución.
El puente vehicular es una continuidad del Viaducto Poniente que conecta a esta zona con Boulevard Bernardo Quintana, donde se pretende una extensión de 700 metros hasta la intersección con avenida de La Luz, donde se contempla la mejora de la imagen urbana, aunque con varios inconvenientes.
Las peticiones del Comité han sido en torno al arbolado de esta área, así como el que el municipio adquiera terrenos para compensar la zona de esta parte de la ciudad, que al ser lacustre hay una dinámica hídrica importante, por lo que buscan un equilibrio ecológico. Además contemplan la creación de pasos peatonales.
También pretenden que esta infraestructura sea creada con perspectiva de género, a fin de salvaguardar la seguridad de las mujeres; asimismo que exista una movilidad para personas con discapacidad, con enfoque en el medio ambiente, de una manera interseccional para prevenir situaciones de riesgo.
Se les presentó una adecuación a la ciclovía donde se les hizo mención que esta sea en camellón central a un costado de un área peatonal, en aras del beneficio de peatones y ciclistas, quienes no cuentan con las condiciones necesarias para transitar, y que acusan a esta obra de carecer de empatía con este sector, que es mayoritario en esta zona y a nivel ciudad.
Incluso, el comité hizo referencia a situaciones de inundaciones en la zona, un tema que no ha sido abordado y que puede complicar el tránsito de personas aún con esta obra, pues si bien se realizó un cárcamo para evitarlo, el crecimiento urbano y el asfalto, impide que el agua se filtre, generando mayor cantidad de circulación de agua en periodo de lluvias.
Las autoridades, sin embargo, aunque escucharon las peticiones, abrirán nuevos espacios de diálogo en búsqueda de darle solución a estas proclamas ciudadanas, donde con anterioridad tuvieron algunos desencuentros con vecinos, pues estos afirmaron que los representantes de municipio se comportaron de manera grosera, sin escucha y con muchos juicios, por lo que estarán presionando para evitar que esta obra refuerce la inseguridad ciudadana en la movilidad, de la que se dicen preocupados.