Más allá del punitivismo: ciudades para la vida
Partamos de la premisa que nadie quiere atropellar: nadie quiere matar a nadie. Nadie quiere ese pesar en su corazón y en su memoria.
Partamos de la premisa que nadie quiere atropellar: nadie quiere matar a nadie. Nadie quiere ese pesar en su corazón y en su memoria.