Fotografía: Laura Santos


Gatosabio es una pequeña librería localizada en el Mercadito Carranza, en calle Venustiano Carranza, en el Centro Histérico de la ciudad de Querétaro; un rinconcito donde conviven textos de feminismo, género y sobre corporalidad, entre ensayos, literatura y teoría, temas que Daniela González, Dansincuerpo, propietaria, buscó focalizar ante la ausencia de contenidos al respecto en esta ciudad.

Esta librería cumplirá este 2023 dos años desde su creación, en una contexto poco favorecedor para el emprendimiento cultural siendo este uno de los sectores más afectados luego de la pandemia de Covid-19; sin embargo, Gatosabio ha continuado su marcha, en la promoción de escritura hecha por mujeres y también en apoyo de editoriales independientes, las cuales pueden encontrar entre su estante.

«Cuando inicié con esta idea era un tiempo en que las secciones de género y feminismo eran escasas. A mí lo que me interesaba era más difusión de los temas. Con los movimientos feministas que surgieron en los últimos años, 2019 fue histórico para Querétaro, con una marcha así de grande, donde las morras comenzaron a interesarse más. Los libros que tenían que ver con feminismo tuvieron un auge distinto».

Explicó que la variedad de formatos de escritura es parte de lo que Gatosabio intenta generar, pues si bien, como egresada de Filosofía y con estudios de género y arte contemporáneo se interesó más por la teoría, la literatura ha sido otro punto importante de comprensión y difusión de ciertas nociones sobre el propio feminismo o la teoría de género, principalmente la escrita por mujeres.

«No siempre tengo los mismos títulos; como solo es un librero pequeño trato de que no se repitan; a veces hay más teoría feminista o teoría de género y ahora estoy metiedo más literatura escrita por mujeres: poesía, ensayo, cuento, lo que tenga que ver con la visión desde las escritoras. Digamos que la diferencia de Gatosabio con otras librerías es que son libros para un público específico que tiene una perspectiva crítica acerca de la situación que acontece a nivel social».

«Mi gata se llama Castor»

El origen del nombre Gatosabio surgió por un apelativo que Dansincuerpo le puso a su gata de nombre Castor: «es como a veces le digo a mi gata, pues mientras yo estudiaba ella se acostaba encima de los libros y fue un apodo que le empecé a decir. Quería estar entre los libros, se quedaba dormida. Si el libro estaba abierto y lo revisaba iba y se ponía y no me dejaba leerlo, y desde que pensé en tener una librería inmediatamente salió ese nombre, que tiene que ver por mi amor por los gatos y por el saber».

La vendimia de libros fue una actividad que comenzó hace tiempo, casi de manera natural, pues lo hacía a través de las redes sociales hasta poco a poco tener que invertir para conseguir algunos títulos, por lo que la gente la comenzó a ubicar como librera, aunque sin espacio físico en concreto. Acudió a ventas de libros en la Ciudad de México e incluso optó por vender los propios, en un camino que la fue llevando hasta tener su espacio, en Mercadito Carranza.

De hecho, al comenzar este proyecto, fue contactada por un grupo de libreras a nivel nacional, tales como La Meiga, La Cosecha, El Entusiasmo, Astillero, U-Tópicas y El Traspatio, con el que organizaron la llamada Liga de Libreras Feministas, en un vínculo que permita no solo el diálogo sino la de hacer frente ante las corporaciones de libros.

«Es una liga porque permite unir pero no forzar; hay espacio, flexibilidad e hicimos una especie de manifiesto. Es un grupo que va de manera unida para, por ejemplo, dirigirnos a las editoriales, porque es difícil pelear contra estos monstruos de librerías y es difícil porque ellos compran en volumen, tienen un precio preferente y dan descuentos, y a lo mejor el librero no puede hacerlo. Como grupo es hacer fuerza».

A futuro…

Dansincuerpo, una de las pocas libreras en la ciudad, indicó que a futuro le gustaría que Gatosabio integrara un proyecto de mujeres en la ciudad, en un espacio donde se desarrollen talleres, gestión, eventos, entre otras actividades, a la espera de tomarse su tiempo para reflexionar y hacer las cosas con calma.

En su búsqueda por acercar este tipo de libros y temas refiere que es importante la escucha, de nuevas alianzas, del autoreconocimiento y la exploración sobre nuevas perspectivas; de continuar en ese crecimiento y con ello, desarrollar proyectos críticos junto a otras compañeras y organizaciones.

«Es importante escucharnos entre nosotras, más que difundir, pues hay mucho ruido y necesitamos parar y escucharnos, ¿qué sigue? ¿Qué es lo que queremos? ¿Cómo hacerlo? Si estamos viendo las cosas críticamente o solo repetimos todo lo que oímos en todos lados. Necesitamos tomarnos un momento de pensarnos… y es un tiempo muy bueno para saber qué hace la otra y eso genera nuevas alianzas».

Librería Gatosabio se localiza en el Mercadito Carranza, en calle Venustiano Carranza #3, de 11 de la mañana a 8 de la noche, y pueden localizarla como gatosabio.libreria en Facebook e Instagram.

David Álvarez
davidalv1990@gmail.com
Sociólogo, periodista y gestor cultural. Dirige Proyecto Saltapatrás.

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